Estados Unidos presenta al Bombardero Stealth B-21

Tras siete años de desarrollo finalmente el 2 de diciembre de 2022 se presentó al público el nuevo bombardero invisible B-21 “Raider”.

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El Bombardero del Futuro

Northrop Grumman, la compañía a cargo de desarrollar el B-21 Raider, ha estado trabajando en este proyecto desde mediados del año 2000 bajo la idea de disponer de un bombardero capaz de burlar por completo los sistemas de defensa enemigos a fin de alcanzar a cualquier objetivo en el corazón de una nación ya sea mediante armas convencionales y/o nucleares.

Desde entonces han estado trabajando en este nuevo bombardero de largo alcance que además debe reemplazar al viejo pero aun en servicio B-2 Spirit, que fue construido durante los tiempos de la Guerra Fría.

A diferencia de otros proyectos el B-21 se ha mantenido hasta ahora dentro de las expectativas y no ha sufrido de ningún atraso en su desarrollo, aun cuando se trata de un proyecto altamente costoso y con componentes considerablemente delicados.

Esto se debería a muchas cuestiones, para empezar el B-21 se caracteriza por ser el primer avión diseñado digitalmente desde cero, es decir, no se realizaron planos ni diagramas físicos para poder desarrollar todos sus componentes.

Al poder diseñar el avión de forma digital fue posible emular el comportamiento de cada componente, evitando así pasar por pruebas y errores físicas que hubiesen comprometido los tiempos de desarrollo del bombardero, lo que acelero enormemente el proceso de diseño del B-21. Así lo confirma la presidenta y directora ejecutiva de Northrop Grumman, Kathy Warden.

A todo esto hay que sumarle que las inversiones hechas al programa se hicieron de tal forma que parecería que el gobierno estaba destinando fondos a la adquisición de otras armas o sistemas, lo que también le ha permitido mantener su desarrollo en secreto.

También desviaba la mirada de otras potencias como Rusia y China, evitando que estos tomaran acciones y desarrollaron posibles programas que respondieran al B-21.

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Las rigurosas normas que se establecieron en torno al desarrollo del bombardero dieron como resultado que se pudo evitar el “aumento de los requisitos” y la sobrerregulación del mismo, aspectos que anteriormente habían llevado al fracaso a muchos otros proyectos prometedores.

Así, tras varios años de desarrollo, el B-21 se presentó en Air Force Hangar 42, en Palmdale, California, el mismo lugar donde hace 30 años había sido presentado su antecesor el B-2.

Su nombre fue dado por la U.S Air Force (USAF) en referencia a nuestro siglo, XXI, y Raider fue elegido en honor al Teniente Coronel James Doolittle y sus Doolittle Raiders, quienes durante la Segunda Guerra Mundial llevaron a cabo el bombardeo sobre Tokio tras el ataque japonés a Pearl Harbor. Durante la ceremonia estuvieron presentes los familiares de Doolittle.

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La Revelación

Tras una década de diseño y desarrollo la compañía está orgullosa de presentarnos finalmente su ultra secreto bombardero B-21, explicando que se trató de un programa de 50 años de uso e investigación de tecnología “Stealth”.

El Secretario de Defensa, Lloyd Austin III, menciono durante la ceremonia: «La ventaja del B-21 durará las próximas décadas».

Austin también mencionó que: «El B-21 se ve imponente, pero lo que hay debajo del marco y su revestimiento de la era espacial es aún más impresionante […] Incluso los sistemas de defensa aérea más sofisticados tendrán dificultades para detectar el B-21 en el cielo».

Una característica muy importante de este nuevo bombardero es que fue diseñado para tener una arquitectura abierta, así sus sistemas podrán ser actualizados de forma rápida y sencilla conforme las tecnologías AA avanzan.

A esto se le agregan algunas palabras de la propia compañía, ya que el B-21 esta «empleando nuevas técnicas y materiales de fabricación para garantizar que el B-21 derrote a los sistemas de negación aérea y anti acceso que enfrentará».

Con el bombardero revelado la compañía ahora puede darle paso a la producción en masa, un plan que estaba contemplado desde 2015 y que menciona la entrega hasta de 100 bombarderos con un costo de hasta $500 millones de dólares unitarios. Cabe destacar que ese precio data del valor de dólar del 2010, con la economía actual es muy difícil determinar el nuevo precio real del B-21.

Esto último ha generado serias dudas de si el programa será rentable a largo plazo, ya que por ejemplo la compañía tuvo que cancelar la producción del caza F-22 Raptor en 2009 después de que el gobierno considero que el programa de fabricación y mantenimiento era excesivamente caro.

Un F-22 puede llegar a costar hasta $380 millones de dólares y ni hablar del mismo B-2 Spirit de los cuales solo mantienen 20 en servicio puesto que sus costes de producción y mantenimiento son muchos más extensivos.

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Además, aún falta el vuelo de prueba, la compañía asegura que el B-21 es completamente fiable y aun con su enorme costo será mucho más sencillo de mantener que los B-2.

“Pronto volaremos este avión, lo probaremos y luego lo pondremos en producción”, dijo Austin. Las pruebas están previstas para 2023 y se espera que el primer lote de bombarderos sea entregado a la base de la Fuerza Aérea de Ellsworth, ubicada en Dakota del Sur.

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¿Son Necesarios?

Algunos expertos han empezado a cuestionarse el porqué de una unidad tan cara y avanzada si actualmente, aun con las tensiones en Europa, no hay nada que pueda comprometer a Estados Unidos.

Muchos especulan que el desarrollo tan temprano del B-21 se debe a dos cuestiones principales:

• La futura amenaza de China

• Mantener la iniciativa ofensiva

El B-21 se caracteriza por una serie de capacidades que superan con creces a los bombarderos actuales como una carga útil mayor, un rango mucho más amplio y la capacidad de desplegar drones.

Como tal, el B-21 Raider le garantiza a Estados Unidos que en caso de un conflicto tiene la capacidad de alcanzar a cualquier objetivo primordial dentro del territorio enemigo.

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Si acaso se lograra desatar un conflicto mucho más directo con China, el B-21 Raider podría atacar su infraestructura bélica o eliminar amenazas que puedan comprometer las operaciones de otras unidades, si es tan avanzado como asegura Northrop los escenarios útiles para este bombardero son mucho más amplias.

Además de ser una pieza mucho más importante dentro de la Triada Nuclear, ya que en un conflicto de este estilo el bombardero podría burlar todos los sistemas defensivos de una nación y atacar con una ojiva nuclear la zona de interés, sería un arma con la que no se podría responder tan eficazmente como lo sería frente a un propio ICBM lanzado desde una plataforma.

Sin duda el B-21 Raider le abre un sinfín de posibilidades a Estados Unidos, pero por el momento debemos esperar a las pruebas de vuelo y ver si es tan fiable como las computadoras de la compañía afirman que será.